PRÓLOGO. Clemencia Baraldi
 

Es este un libro que nos propone y obsequia una serie de conceptos. Trama que supone un tejido. Un tejido requiere el acto de “poner los puntos”, acompasar los hilos teóricos desde donde comenzar la urdimbre. Es entonces que los grandes autores nos visitan en estas provechosas páginas: Winnicott, Piaget, Ajuriaguerra, Bruner, Lydia y Elsa Coriat, Wallon, Garbarz, Tosquelles, Bowlby, Freud y Spitz entre otros se hacen presentes en este acto de enhebrado. Acto que revela un claro trabajo de selección precisa de la autora quien atrapa con visibilidad y destreza aquellos aportes significativos a la práctica de una clínica especifica.

Estas ideas, lejos de producir una captura, se entrelazan interdisciplinariamente para construir los tres pilares fundamentales y fundantes de la estimulación temprana: neurobiología, psicoanálisis, y psicología genética con sus coletazos en otras áreas o saberes.

Estas hebras teóricas hilvanan las palabras fecundas de la autora, quien de manera sencilla y rigurosa nos ofrece sus propias elaboraciones y preguntas. Ideas genuinas construidas en un intercambio dialéctico entre la práctica y la teoría. Así por ejemplo nos dice: “Llamamos hábitos a uno de los modos de ingreso a la cultura. Será el adulto a cargo quien cumpla la principal función reguladora, propiciando, por ejemplo, que progresivamente el niño pueda prolongar el período de sueño nocturno. Un niño que comienza a dormir más, que registra la diferencia entre el día y la noche, pone en evidencia su capacidad para adaptarse al ritmo de la casa”.

También… "Cuando un pequeño se larga a caminar, no es solamente por la maduración de su aparato locomotor y su sistema nervioso, sino porque tiene la intención de ir hacia otro lugar, de forma independiente, separarse de la mamá, volver a encontrarla. Es evidente que las modalidades de relación de la madre con el niño influyen en las cuestiones del desarrollo".

Son pequeños fragmentos que ilustran un saber formalizar aquello que se nos da a ver.

En estas páginas se desliza un análisis pormenorizado de cada trimestre donde el infante se aventura a nuevas conquistas, siempre claro está, sostenido por el marco simbólico que supone la presencia de funciones parentales. Nos dice Maidagan del niño "Él mismo se entrena y juega en el transcurso de sus aprendizajes"

Conocer el desarrollo normal del infante permitirá al terapeuta ubicar algunas señales que amenazan la evolución esperada, desde allí podrá ubicar con precisión la maniobra clínica a definir……se pedirá una consulta con otro especialista? Se trabajará sobre los temores de los padres? Se propondrán estrategias a seguir con el pequeño? Sin que estas sean alternativas excluyentes, sabemos que todo hacer solo podrá sostenerse en el artilugio transferencial donde los padres sean alojados ya que esta clínica no será sin ellos.

Nos dice la autora que la estimulación temprana solo es posible en el marco de un equipo interdisciplinario y este equipo en Rosario nació en el Centro del Desarrollo infantil que hoy ya cuenta con casi cuatro décadas de experiencia. Estas letras son efecto de largas reflexiones donde la práctica ha sido procesada y la ética sostenida.
El terapeuta único se capacita para habilitar a los padres a confeccionar con sus propias manos la manta simbólica que albergará a su hijo o hija más allá de la discapacidad que porte.

Los padres necesitan sostén para sostener ellos a su vez al recién llegado.

De allí las palabras que titulan este libro que hoy nace a la comunidad.
 

CLEMENCIA BARALDI - Psicoanalista. Psicopedagoga del Centro de Desarrollo Infantil
Rosario. Fundadora y coordinadora de los espacios educativo terapéutico “Un Lugar Para Aprender” y “Marca Naturaleza”